La idea surgió en 2005. Mark Johnson, ingeniero de sonido y productor, decidió grabar al cantante Roger Ridley cantando la canción Stand By Me de Ben E. King. Pero mientras rodaba tuvo una idea magistral: ¿Por qué no añadir a otros músicos en la misma canción? ¿Y si estos músicos son de diferentes culturas y lugares del mundo?
En ese momento comenzó todo un reto. Con las ganancias generadas con éstas grabaciones se crearían escuelas de música por todo el planeta.
Y así ha sido. En 2009 se sacó el primer y único disco (por ahora); se han creado 7 escuelas de música en los lugares mas desfavorecidos y pobres.
Ya han tenido su propia gira que les llevó a Madrid en 2009.
"La música es para el alma lo que la gimnasia para el cuerpo" (Platón)
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